¿Te sientes frustrado por la rápida transformación de tu cabello de fresco y limpio a grasoso y sin vida? No estás solo. Muchas personas luchan con el cabello graso, lo cual puede ser tanto inconveniente como un signo de problemas más profundos. En esta publicación del blog, la tricóloga Kate Holden arroja luz sobre por qué tu cabello podría estar poniéndose grasoso más rápido de lo que te gustaría y ofrece soluciones prácticas para manejarlo y prevenirlo. Desde fluctuaciones hormonales hasta hábitos de cuidado del cabello inadecuados, descubre los factores clave que afectan la producción de aceite en tu cuero cabelludo y aprende cómo ajustar tu rutina para un cabello más saludable y menos grasoso. Sumérgete en su consejo experto para abordar este problema común y mantener tu melena en su mejor estado.
1. Hormonas y tu ciclo menstrual:
Las hormonas juegan un papel significativo en la condición de tu cuero cabelludo y cabello. Las fluctuaciones en los niveles hormonales, particularmente durante tu ciclo menstrual, pueden llevar a un aumento en la producción de sebo. Justo antes de tu período, los niveles de estrógeno disminuyen mientras que los niveles de testosterona pueden volverse más dominantes. Este cambio puede estimular las glándulas sebáceas en tu cuero cabelludo, llevando a raíces más grasosas y cabello más grasoso en general. Las mujeres con síndrome de ovario poliquístico, que se estima que somos el 10%, son más propensas a tener cabello graso debido a los niveles típicamente más altos de andrógenos.
Si tu cabello está súbitamente más grasoso, puede ser desencadenado por cambiar tu anticonceptivo. Algunos anticonceptivos hormonales contienen progestinas que se comportan de una manera más androgénica, y algunas mujeres experimentan cabello más grasoso cuando toman la mini píldora o tienen el dispositivo intrauterino Mirena.
2. No limpiar tu cepillo de cabello con suficiente frecuencia:
Tu cepillo de cabello puede albergar aceite, suciedad y residuos de productos de estilizado. Cuando te cepillas el cabello, especialmente después de lavarlo, podrías estar reintroduciendo estos de vuelta en tu cabello limpio. Hazlo un hábito limpiar tu cepillo regularmente, aproximadamente una vez a la semana, para asegurarte de no transferir suciedad de vuelta a tu cuero cabelludo.
3. Lavar tu cabello en exceso:
Podría parecer contradictorio, pero lavar tu cabello con demasiada frecuencia puede exacerbar las raíces grasosas. Cuando despojas a tu cuero cabelludo de sus aceites naturales con demasiada frecuencia, puede entrar en sobremarcha tratando de reemplazarlos, llevando a un aumento en la producción de sebo. Esto puede crear un ciclo vicioso de cabello grasoso. Una buena regla general es lavar tu cabello cada 2-3 días, y semanalmente para el cabello más rizado, dependiendo de tu tipo de cabello.
Usar agua demasiado caliente o ser demasiado vigoroso cuando lavas tu cuero cabelludo también puede estimular la producción de sebo, así que baja la temperatura de tu ducha y ve con calma con el masajeador de cuero cabelludo.
4. Usar el champú y acondicionador equivocados:
No todos los champús y acondicionadores son iguales, especialmente cuando se trata de raíces grasas. Algunos champús contienen sulfatos más fuertes que pueden eliminar los aceites naturales del cuero cabelludo, lo que provoca una sobreproducción de sebo como mecanismo de defensa. En su lugar, opta por una fórmula suave y sin sulfatos que equilibre la producción de aceite sin eliminarlo.
Por otro lado, si lidias con hiperseborrea o un cuero cabelludo excesivamente graso, es posible que necesites usar un champú con sulfato más fuerte o un champú clarificante cada semana para eliminar la acumulación. Si tienes la rutina de cuidado del cabello adecuada, está bien lavarse el cabello diariamente.
5. No enjuagar adecuadamente:
Es crucial enjuagar bien el champú y el acondicionador. Si dejas residuos, pueden mezclarse con tus aceites naturales, lo que conduce a acumulación y grasitud. Asegúrate de pasar un minuto o dos extra en la ducha para asegurarte de que todo el producto se haya lavado por completo.
6. Tocar tu cabello con demasiada frecuencia:
Pasar constantemente los dedos por tu cabello puede transferir aceites de tus manos a tus mechones, haciendo que tu cabello se vea grasoso más rápido. Trata de mantener tus manos fuera de tu cabello tanto como sea posible durante el día.
7. Estás experimentando pérdida de cabello:
Si has notado que tu cabello se está adelgazando o cayendo más de lo habitual, probablemente tu cuero cabelludo se sienta más grasoso de lo habitual también. Esto se debe a que cada folículo piloso tiene una glándula sebácea, por lo que cuando no hay tanto cabello, el sebo se acumula en el cuero cabelludo en lugar de cubrir tu cabello. Abordar tu pérdida de cabello puede ayudar a remediar esto.
8. Usar los productos para el cabello incorrectos:
Algunos productos de peinado pueden hacer que tu cabello se vuelva grasoso, especialmente aquellos que son demasiado pesados o contienen aceites no adecuados para tu tipo de cabello. Busca productos que estén específicamente diseñados para raíces grasas o que tengan fórmulas ligeras y no comedogénicas. El Back to Balance Shampoo de Noughty es una excelente opción para aquellos con raíces grasas. Este champú natural y sin sulfatos limpia suavemente sin eliminar el cuero cabelludo, ayudando a normalizar la producción de sebo y extender el tiempo entre lavados. Formulado con provitamina B5 hidratante, glicerina y árbol de té, que trabajan juntos para hidratar y equilibrar tu cabello.
Ingredientes a buscar:
Si tienes raíces grasas, es importante elegir productos con los ingredientes adecuados para ayudar a equilibrar tu cuero cabelludo sin abrumarlo. Aquí hay algunos ingredientes a buscar:
Ingredientes a Evitar:
Aceites Pesados: Ingredientes como el aceite de coco y el aceite de argán pueden ser demasiado pesados para aquellos con raíces grasas, lo que potencialmente empeora el problema.
Siliconas: Aunque las siliconas pueden hacer que el cabello se sienta suave y brillante, también pueden acumularse en el cuero cabelludo y el cabello, atrapando el aceite y llevando a raíces grasosas.
¿Deberías Usar un Champú Clarificante o un Exfoliante para el Cuero Cabelludo?
Si tienes problemas con el cabello graso, incorporar un champú clarificante o un exfoliante para el cuero cabelludo en tu rutina puede ser muy beneficioso.
Los champús clarificantes están diseñados para limpiar profundamente tu cabello y cuero cabelludo, eliminando la acumulación de productos, el exceso de aceite y las impurezas. El Champú Clarificante Detox Dynamo de Noughty es una excelente opción para este propósito. Desintoxica eliminando la acumulación y eliminando las impurezas que obstruyen los folículos y los residuos ambientales. Su fórmula natural y libre de sulfatos limpia suavemente sin despojar tu cabello, dejando tu cuero cabelludo sintiéndose saludable y limpio. Los extractos rehidratantes de hoja de acedera y menta también ayudan a reponer la humedad perdida, apoyando la condición óptima del cuero cabelludo y el cabello.
Los Exfoliantes para el Cuero Cabelludo son otra excelente opción para abordar el cabello graso. Exfolian el cuero cabelludo, ayudando a eliminar las células muertas de la piel y la acumulación que puede llevar a la oleosidad. El Exfoliante Clarificante Detox Dynamo de Noughty está diseñado para eliminar las células muertas de la piel, el sebo y la acumulación. Contiene un trío de activos exfoliantes naturales: polvo de piedra pómez, bambú verde y cáscara de coco triturada, que trabajan juntos para dejar el cuero cabelludo limpio y fresco, sin residuos ni partículas. Además, el exfoliante estimula la microcirculación, dando a tu cuero cabelludo un inicio saludable. Al igual que con los champús clarificantes, es importante no usar en exceso los exfoliantes para el cuero cabelludo: una vez a la semana suele ser suficiente.
1. Hormonas y tu ciclo menstrual:
Las hormonas juegan un papel significativo en la condición de tu cuero cabelludo y cabello. Las fluctuaciones en los niveles hormonales, particularmente durante tu ciclo menstrual, pueden llevar a un aumento en la producción de sebo. Justo antes de tu período, los niveles de estrógeno disminuyen mientras que los niveles de testosterona pueden volverse más dominantes. Este cambio puede estimular las glándulas sebáceas en tu cuero cabelludo, llevando a raíces más grasosas y cabello más grasoso en general. Las mujeres con síndrome de ovario poliquístico, que se estima que somos el 10%, son más propensas a tener cabello graso debido a los niveles típicamente más altos de andrógenos.
Si tu cabello está súbitamente más grasoso, puede ser desencadenado por cambiar tu anticonceptivo. Algunos anticonceptivos hormonales contienen progestinas que se comportan de una manera más androgénica, y algunas mujeres experimentan cabello más grasoso cuando toman la mini píldora o tienen el dispositivo intrauterino Mirena.
2. No limpiar tu cepillo de cabello con suficiente frecuencia:
Tu cepillo de cabello puede albergar aceite, suciedad y residuos de productos de estilizado. Cuando te cepillas el cabello, especialmente después de lavarlo, podrías estar reintroduciendo estos de vuelta en tu cabello limpio. Hazlo un hábito limpiar tu cepillo regularmente, aproximadamente una vez a la semana, para asegurarte de no transferir suciedad de vuelta a tu cuero cabelludo.
3. Lavar tu cabello en exceso:
Podría parecer contradictorio, pero lavar tu cabello con demasiada frecuencia puede exacerbar las raíces grasosas. Cuando despojas a tu cuero cabelludo de sus aceites naturales con demasiada frecuencia, puede entrar en sobremarcha tratando de reemplazarlos, llevando a un aumento en la producción de sebo. Esto puede crear un ciclo vicioso de cabello grasoso. Una buena regla general es lavar tu cabello cada 2-3 días, y semanalmente para el cabello más rizado, dependiendo de tu tipo de cabello.
Usar agua demasiado caliente o ser demasiado vigoroso cuando lavas tu cuero cabelludo también puede estimular la producción de sebo, así que baja la temperatura de tu ducha y ve con calma con el masajeador de cuero cabelludo.
4. Usar el champú y acondicionador equivocados:
No todos los champús y acondicionadores son iguales, especialmente cuando se trata de raíces grasas. Algunos champús contienen sulfatos más fuertes que pueden eliminar los aceites naturales del cuero cabelludo, lo que provoca una sobreproducción de sebo como mecanismo de defensa. En su lugar, opta por una fórmula suave y sin sulfatos que equilibre la producción de aceite sin eliminarlo.
Por otro lado, si lidias con hiperseborrea o un cuero cabelludo excesivamente graso, es posible que necesites usar un champú con sulfato más fuerte o un champú clarificante cada semana para eliminar la acumulación. Si tienes la rutina de cuidado del cabello adecuada, está bien lavarse el cabello diariamente.
5. No enjuagar adecuadamente:
Es crucial enjuagar bien el champú y el acondicionador. Si dejas residuos, pueden mezclarse con tus aceites naturales, lo que conduce a acumulación y grasitud. Asegúrate de pasar un minuto o dos extra en la ducha para asegurarte de que todo el producto se haya lavado por completo.
6. Tocar tu cabello con demasiada frecuencia:
Pasar constantemente los dedos por tu cabello puede transferir aceites de tus manos a tus mechones, haciendo que tu cabello se vea grasoso más rápido. Trata de mantener tus manos fuera de tu cabello tanto como sea posible durante el día.
7. Estás experimentando pérdida de cabello:
Si has notado que tu cabello se está adelgazando o cayendo más de lo habitual, probablemente tu cuero cabelludo se sienta más grasoso de lo habitual también. Esto se debe a que cada folículo piloso tiene una glándula sebácea, por lo que cuando no hay tanto cabello, el sebo se acumula en el cuero cabelludo en lugar de cubrir tu cabello. Abordar tu pérdida de cabello puede ayudar a remediar esto.
8. Usar los productos para el cabello incorrectos:
Algunos productos de peinado pueden hacer que tu cabello se vuelva grasoso, especialmente aquellos que son demasiado pesados o contienen aceites no adecuados para tu tipo de cabello. Busca productos que estén específicamente diseñados para raíces grasas o que tengan fórmulas ligeras y no comedogénicas. El Back to Balance Shampoo de Noughty es una excelente opción para aquellos con raíces grasas. Este champú natural y sin sulfatos limpia suavemente sin eliminar el cuero cabelludo, ayudando a normalizar la producción de sebo y extender el tiempo entre lavados. Formulado con provitamina B5 hidratante, glicerina y árbol de té, que trabajan juntos para hidratar y equilibrar tu cabello.
Ingredientes a buscar:
Si tienes raíces grasas, es importante elegir productos con los ingredientes adecuados para ayudar a equilibrar tu cuero cabelludo sin abrumarlo. Aquí hay algunos ingredientes a buscar:
- Ácido Salicílico: Este ingrediente ayuda a exfoliar el cuero cabelludo, eliminando el exceso de aceite y células muertas de la piel, lo que puede contribuir a la acumulación y al cabello grasoso. El Frizz Magic Shampoo de Noughty contiene ácido salicílico, lo que lo convierte en una excelente opción para quienes necesitan una limpieza profunda adicional mientras también manejan el frizz.
- Aceite de Árbol de Té: Conocido por sus propiedades antibacterianas y antisépticas, el aceite de árbol de té puede ayudar a controlar el exceso de aceite mientras calma el cuero cabelludo.
- Hamamelis: Un astringente natural, el hamamelis puede ayudar a tensar la piel y reducir la producción de aceite, lo que lo convierte en una buena opción para los cueros cabelludos grasos.
- Extracto de Té Verde: Rico en antioxidantes, el extracto de té verde puede ayudar a reducir la producción de sebo y promover un ambiente más saludable para el cuero cabelludo.
Ingredientes a Evitar:
Aceites Pesados: Ingredientes como el aceite de coco y el aceite de argán pueden ser demasiado pesados para aquellos con raíces grasas, lo que potencialmente empeora el problema.
Siliconas: Aunque las siliconas pueden hacer que el cabello se sienta suave y brillante, también pueden acumularse en el cuero cabelludo y el cabello, atrapando el aceite y llevando a raíces grasosas.
¿Deberías Usar un Champú Clarificante o un Exfoliante para el Cuero Cabelludo?
Si tienes problemas con el cabello graso, incorporar un champú clarificante o un exfoliante para el cuero cabelludo en tu rutina puede ser muy beneficioso.
Los champús clarificantes están diseñados para limpiar profundamente tu cabello y cuero cabelludo, eliminando la acumulación de productos, el exceso de aceite y las impurezas. El Champú Clarificante Detox Dynamo de Noughty es una excelente opción para este propósito. Desintoxica eliminando la acumulación y eliminando las impurezas que obstruyen los folículos y los residuos ambientales. Su fórmula natural y libre de sulfatos limpia suavemente sin despojar tu cabello, dejando tu cuero cabelludo sintiéndose saludable y limpio. Los extractos rehidratantes de hoja de acedera y menta también ayudan a reponer la humedad perdida, apoyando la condición óptima del cuero cabelludo y el cabello.
Los Exfoliantes para el Cuero Cabelludo son otra excelente opción para abordar el cabello graso. Exfolian el cuero cabelludo, ayudando a eliminar las células muertas de la piel y la acumulación que puede llevar a la oleosidad. El Exfoliante Clarificante Detox Dynamo de Noughty está diseñado para eliminar las células muertas de la piel, el sebo y la acumulación. Contiene un trío de activos exfoliantes naturales: polvo de piedra pómez, bambú verde y cáscara de coco triturada, que trabajan juntos para dejar el cuero cabelludo limpio y fresco, sin residuos ni partículas. Además, el exfoliante estimula la microcirculación, dando a tu cuero cabelludo un inicio saludable. Al igual que con los champús clarificantes, es importante no usar en exceso los exfoliantes para el cuero cabelludo: una vez a la semana suele ser suficiente.